27 de Febrero “La santidad: Bello proyecto de realización humana”
(San Gabriel de la Dolorosa 1838-1862)
El 27 de Febrero de 1862, a la edad de 24 años, moría un joven religioso pasionista que se preparaba para el sacerdocio en Isola del Gran Sasso (junto a los Apeninos, en Italia).
Había nacido en Asís, vivido en Spoleto y soñado con la fama, el reconocimiento, el amor y el éxito como caminos de felicidad y realización. Y sin negar ninguna de esas profundas aspiraciones, Dios le salió al encuentro invitándole a una nueva generosidad como camino de felicidad: la vocación religiosa y sacerdotal en la Congregación Pasionista.
Diversos acontecimientos de su vida, unos de gozo y otros de dolor y la cercanía de la Virgen Madre le pusieron ante la decisión de qué camino escoger.
Movido por la gracia y con voluntad firme emprendió el camino de la vida religiosa como respuesta de amor a una amorosa llamada. Los pasionistas eran testigos y anunciadores del amor de Dios ofrecido en Cristo Crucificado. Con la Virgen Madre y sostenido por ella se reconoció llamado a permanecer junto a la Cruz siendo testigo de aquel fuego y de aquel derroche de amor.
Su escasa edad y sus apenas seis años de religioso pasionista le son suficientes para dejarse modelar por el Señor y realizar en él este proyecto de amor y de felicidad.
Su vida permaneció oculta, sin deslumbrar con grandes éxitos, pero el amor hecho vida en la entrega a lo cotidiano, su compromiso por caminar en la santidad como respuesta agradecida al don de Dios, su intimidad con el Señor y su dejarse configurar por Él, lo hacen para nosotros un signo de la felicidad que Dios es y de la santidad como un bello camino de realización humana.
Por eso le recordamos, se nos hace presente y celebramos su fiesta.
